La desertora norcoreana convertida en ciudadana estadounidense Yeonmi Park explicó recientemente lo que les ocurre a las personas de su país natal que son encontradas con una Biblia.

Yeonmi Park dijo que prácticamente no existía el concepto de Dios cuando ella vivía en Corea del Norte, y que se castigaba a cualquiera que hablara abiertamente o adorara al Señor. “Cuando llegan los comunistas, primero matan el concepto de Dios porque ellos mismos se derivan en ‘Dios’”, dijo en una entrevista que concedió al sitio Mundo Cristiano. “Así que… si tienes una Biblia, te castigan a ti ya toda tu familia”. La lectura de las Escrituras y la celebración de reuniones cristianas pueden acarrear trágicamente las mismas nefastas consecuencias si son descubiertas por las autoridades.

Park, que ha publicado un nuevo libro, “While Time Remains: A North Korean Defector’s Search for Freedom in América” (“Mientras quede tiempo: la búsqueda de la libertad en Estados Unidos de un desertor de Corea del Norte”) compartió su propia historia de huida de Corea del Norte y de las terribles condiciones a las que se enfrentó en China antes de ser rescatada por misioneros cristianos.

En cuanto a su viaje personal por la fe, explicó cómo el nacimiento de su hijo transformó su perspectiva. Pasó años cansada de que le impusieran creencias, pero su embarazo la dejó pensando más profundamente. “Vine a Estados Unidos y tuve a mi hijo”, dijo. “Creo que fue entonces cuando me di cuenta de que yo no podía haberlo hecho. Fue un puro milagro cómo salió de mí… un ser humano maravilloso”.

La maravilla del parto, mezclada con su propia historia de salir de Corea del Norte y llegar a Estados Unidos -una hazaña extremadamente rara- la hizo pensar aún más. “¿Qué posibilidades tengo de estar aquí y llegar hasta aquí?”. Preguntó Park retóricamente. “Creo que siempre ha habido una fuente mayor, algo en mí o en el universo de mí aquí que no puedo entender totalmente”. Dijo que ahora es cristiana y ora para “entender mejor el mundo”.

Park espera que su nuevo libro suscite conversaciones más profundas sobre temas de actualidad entre los estadounidenses. “Cualquier país puede llegar a ser como Corea del Norte”, dijo, señalando que la batalla entre naciones como Corea del Norte y Estados Unidos es real. “Es una guerra entre la tiranía y la libertad. Este país está siendo atacado de muchas maneras diferentes, y es hora de levantarse para defender los valores que hicieron grande a Estados Unidos”.

Fuente y foto: MundoCristiano.tv y Vida Cristiana